Cuando Javier Rivero emigró a México desde Venezuela, se encontraba en la búsqueda de un emprendimiento que le permitiera comenzar una nueva vida, con ilusiones y sueños por cumplir.
Al principio, intentó expandir el negocio de motocicletas que había desarrollado en su país de origen, pero se dio cuenta de que la cocina en parrilla y en horno de piedra —algo que consideraba un hobby— podría transformarse en su trabajo y motor de vida. Tras esa revelación, decidió fundar sus propios restaurantes y los llamó “212”. Primero inauguró una hamburguesería —212 Burger Bar— y luego una pizzería. Tras pocos años en el mercado, 212 Pizza Bar ya cuenta con tres sucursales en Ciudad de México.
Javier se muestra orgulloso de la calidad de sus productos y la pizza napolitana con 24 horas de fermentación que ofrece a sus comensales. Además, utiliza ingredientes originales como el queso de cabra o el plátano macho y, de esta manera, fusiona sabores que también pertenecen a la cultura latina.
Con el éxito que le han dado sus platillos, el fundador de 212 Pizza Bar necesitaba implementar un sistema que le permitiera llevar adelante la administración de sus comercios. Al buscar entre distintos puntos de venta, Fudo resultó ser el sistema de software más útil, simple y amoldable a todos sus emprendimientos.
“Nos pareció la plataforma más sencilla y amigable”
Javier entiende que la perseverancia es la clave principal para que un negocio triunfe; se necesita de un equipo que acompañe con muchas ganas el trabajo detrás del restaurante y fuerza para poder alcanzar las metas y sueños que se quieran trazar.
Con la convicción que lo caracteriza, Javier brinda a sus colegas tres consejos importantes: siempre ofrecer un buen producto, perseverar ante las trabas del camino y apoyarse en herramientas tecnológicas que permitan dar un servicio rápido y eficiente a los clientes, así como también observar con claridad los ingresos y egresos.
“Fudo es bastante accesible para toda la gente que esté emprendiendo”
